31 octubre, 2005

Diosa del alba

Diosa del alba
que me dejás ver
despuntar en tu cama
el rojo sol
a través de tu cabello.
Y así hacés el día bello
al bailar con mis manos
en tu cuerpo
y atrapar tu primer mirada.
Y en la entrada
de tu vientre
festejar para siempre,
anegar tu fuente
con mi río rdiente
y empezar felices
la jornada
con la almohada
como único testigo.
Y el castigo
de tener que levantarnos
se hace más ameno.
Diosa del alba,
yo también puedo hacer milagros
y en la tarde verás
que no existe el ocaso.
En mis brazos
estás segura
que las dudas
morirán mañana.

Me iré

Me iré.
Dejaré tus mensajes sin responder,
todos tus poemas sin leer
por mucho tiempo
hasta que un día junte aliento
y vea si ya no duelen tanto.
Descubriré en ellos el encanto
supremo del cariño
y lloraré como un niño
abandonado.
Cuando hube sido yo
el valiente acobardado
que huyó de la sinrazón
de un enamorado sin amor,
de un cariño bello
y nada más,
de una caricia en tu cabello
pero no en tu alma.
Me iré por el dolor y el drama
de saber que nunca jamás
podrás amarme.
Me iré por sobrevivir
y moriré en el intento
de olvidarte.

28 octubre, 2005

Poema ultraterreno

Quiero siempre darte
mi cariño
y con él quiero tocarte
el resto de mis días.
Quiero crecer juntos
y ya difunto,
en la otra vida
(si eso es posible),
quiero que tu amor me libre
del infierno.
Quiero que mi amor
te marque para siempre.
Y que tu imagen
fuera océano
y yo naufragar
bajo tus olas de misterio.
Y quiero que ya ceniza
tu tierna brisa
me lleve de paseo.
Que hasta muerto
sé que es cierto
que te amo
como nunca amé
en la vida.

Poema para Bettina VIII

Te juro que nunca
voy a dejar de abusar de vos,
mi vida.
Te juro que nunca
voy a dejarte en paz
ni tranquila.
No te prometo
un jardín de rosas,
te prometo espinas
sin pétalos apenas.
Y a duras penas
transitar la vida,
pero juntos,
siempre juntos
buscando maravillas.

El día en que

El día en que se rompan
tus frenos
será el más feliz de mi vida.
El día en que el amor
me niegue tu partida
será el momento exacto
en que te confiese todos mis sueños
de pertenencia y de risueño
poseedor de tu sonrisa.
El día en que el torrente
rompa todo dique
será el día que claudiquen
todos mis miedos.
Y el angustioso tedio
de sentirte tan inasible
se hará imposible.
Y lo posible se hará cierto
y lo cierto, maravilla.

El don de la conciencia

Veloz el tiempo
se sucede indiferente
y pasa por la gente
como fantasma.
Es una carga
que llevamos todos los vivos
que sufrimos lo sufrido
con tantas ganas
y gozamos apenas
lo que es digno
de tanto gozo.
Acaso los dioses no quieran
tanto pesar, tanta quimera,
pero sepan
que no es para cualquiera
el don de la conciencia
de entender la vida como premio
y no como tragedia.
Tal vez el paraíso
y el infierno
fueran el castigo
y el gran premio
de nuestro disfrute
y no de nuestros pecados.
Y los ángeles alados
o cualquier hado imaginario
no nos guarden de los males
y todos los pesares
dependan casi por entero
de nosotros.
Y el destino que creemos
tan ajeno
pueda ser un poco bueno
si ponemos la vida
en la balanza
diariamente, sin tardanzas
y no al final de nuestras vidas.
Y si la fe no alcanza
busquemos en la alegría,
en el disfrute y en los sueños
las fuerzas necesarias.
Que es preciso ser muy trueno
para imperar en la tormenta
y que el mundo sepa
que vinimos y partimos,
pero al demorarnos
supimos estar vivos.

Arrastro en mi cuerpo

Terminó el día
y el cansancio siento todavía
por nuestro amor de temprano.
Arrastro en mi cuerpo
y llevan mis manos
todos tus espasmos.
El placer brindado
y recibido en la mañana,
cuando el sol en tu ventana
jugaba con las nubes
y la ruidosa urbe
trajinaba su jornada
sin saber nada de nada
de nosotros
que perdíamos almohadas
en los lindes de tu cama.
Arrastro en mi cuerpo
el cansancio del ocaso.
Y esta tenue noche
en la que tanto te extraño,
sé que es un derroche
amarnos tanto
y dormir tan separados.

27 octubre, 2005

Ocho semanas

Hoy te escribí
poemas encarnados.
Con mis manos
toqué la maravilla
y derramé mi semilla
dentro de tu cuerpo
y mi alma se fundió
con la tuya,
como es ya costumbre,
entre loas y aleluyas.
Desde nuestros ojos
que se buscan
y nuestras pieles que sudan
amor y ganas,
en apenas ocho semanas
estamos juntos,
nunca atrás, nunca adelante
como nunca con nadie
estuvimos antes
en toda nuestra vida.

26 octubre, 2005

Tu sueño y el mío

Te seguiré confesando
mis sueños
mientras dormís
en mis brazos
y medio dormido
te recito poemas
luego olvidados.
Me entregaré al sueño
pegado a tu cuerpo,
hundido en tu pelo
y rodeando tu pecho
con mi abrazo.
Mis manos ancladas
en tus senos
tan llenos de vida
que despierta mi descanso.
Invadiré tus fantasías dormidas
y las pesadillas
huirán de mi presencia,
que con tu anuencia
soy más fuerte
que el miedo.
Y las tristezas
derroto una a una
y muere aburrido el tedio.
Mi cuerpo amarrado
a tu cintura
también duerme
pero mi mente hierve
inventándote poesía.

Breve nana para Bettina

Disfrutá tus sueños dormidos
que despierta
mis sueños te persiguen,
son buenos y quiero
atraparte en ellos
para que todo lo imperfecto
del mundo no interese,
para que tu alma profese
el mismo credo que la mía
de un dios bueno
pródigo en dichas
que no se distrae con los pecados
y piensa que es un crimen
ser cobardes
ante la vida que nos ha dado.
Dormí como un ángel, Bettina,
que no necesitás más cuidado
que mis versos dibujados
entre tantas caricias.

25 octubre, 2005

Poema contra el presente perpetuo

Ojalá que el hoy dure para siempre
y que nunca te vea indiferente
a mi cariño.
Ojalá que mi destino
fuera lo suficiente poderoso
como para atarte a mi mañana.
Ojalá que encuentre la artimaña
o la sabiduría necesaria
para colmar tus espectativas
y que no tema tu alma de niña
y que confíe tu mujer desconfiada.
Ojalá que las hadas estén ociosas
y que la magia no haga falta
cuando el sol que se levanta
a diario
se te antoje un solo día.
Ojalá no exijas portentos y milagros
para sentirte tan viva
y saberte enamorada.

Poema para Bettina VII

Si callo mis dolores
y escondo mis lágrimas tan mal
como para que te des cuenta de ello,
no me lo agradezcas.
Si tiemblo y no te digo,
si a veces creo que persigo
un fantasma inalcanzable e inasible
que casi hace imposible
que mis sueños sueñen un futuro.
Si mi silencio te sirve
tendrás entonces silencio.
Pero no pidas que calle siempre
y no pidas que mi amor calle
todas las palabras
que quiero dibujar en tu cuerpo.
Y como tu aliento
parece darme vida
y tu probable partida
solo traiga muerte
ojalá que éste presente
de cosas buenas
avienten tus dudas
y mi certeza te sirva
como grata compañía.

Arrullo de caricias y poemas

El arrullo de caricias y poemas
anoche te ha dormido
y tu carne y alma han sentido
el placer de estar acompañadas,
que las caricias y las palabras
cuando se prodigan con esmero
tienen la fuerza de la sangre
de un amante que arde
pero que busca tu sueño
para que en él descanses
tu cansado día y tu tristeza.
Sabrás por tus vivencias
que noches como ésas
no se dan muy a menudo,
pero yo te prometo y te aseguro
que mis dedos y mis versos
serán siempre traviesos
en las cercanías de tu cuerpo
y dentro de tu alma.
Ellos sabrán en los tiempos de calma
darte calma
y en la tormenta ser el rayo
que en medio del silencio
te encienda y explote el trueno
que dejará sin freno
tu placer extremo de estar viva.
Porque yo he venido a tu presente
para batir a muerte
desamores y malas experiencias
y a conciencia
hoy te digo que te amo
y que no reclamo
más que tu presente
y muchas noches de cariño.

Nos miran por la calle

Nos miran juntos por la calle
y nosotros no los vemos,
no podemos ni queremos
demorarnos en el mundo
cuando el furibundo
deseo nos acosa.
Nos miran juntos y su envidia
ni siquiera nos roza
y así son las cosas
cuando estamos juntos por la calle.
La gente ve la maravilla
y no comprende
que si la vida te sorprende
en un callejón oscuro
lo único seguro
espresentar batalla.
La gente mira con sorpresa
cuando ella me besa
y yo la recorro con mis manos
y resulta extraño
que prefieran la indiferencia
de todo el mundo,
todos los días
al amor tan elocuente
de dos amantes ardientes
que de vez en cuando
se les cruzan en su camino.

24 octubre, 2005

En el río sinuoso de tus venas

En jardines de flores
hoy con la lluvia
quiero tenerte.
Bajo las gotas heladas
quiero sentir el fuego
de tu cuerpo.
Y el disfrute borre el frío
en el río sinuoso de tus venas
y caducar las penas
de tu vieja vida.
Quiero en plena recorrida
encontrar la guarida
de tu orgasmo
que entre espasmos
y desaforados gritos
me dediques como ofrenda
que sorprenda
a las empapadas flores
y como licores
de arguandiente
emborrachen mis neuronas
para olvidar las personas
que quieren vernos separados.
Estoy preparado a todo
por estar contigo
y el tiempo perdido
que la vida ha perdido
recuperarlo ansioso
en un amor peligroso
y que no se detiene nunca.
No quedarán truncas
nuestras ilusiones
siempre y cuando
estemos juntos.

Símbolo de alegría

No te vayas nunca
de mi lado,
no me dejes solo
y tan enamorado.
No quiero un poema
de lamentaciones,
pretendo con vos
vivir nuestras emociones
siempre juntos.
Ya sé que te pregunto
repetidas veces
si me querés
y que eso te duele.
Ya sé que mi velocidad
a veces te abruma,
pero así como tu piel
perfuma
toda mi existencia,
así en mi locura
está la coherencia
de saberme tuyo
ahora y siempre
porque tu voz de arrullo
me ató a tu vida.
Quiera Dios
que tu partida
no se produzca nunca
y que mi corazón
te toque
como mis leves caricias
y te ate a mi destino
no como sino triste
sino como símbolo
de alegría.

22 octubre, 2005

Escritos en tu cuerpo

Quiero un poema
para escribir en tu cuerpo,
usar tu piel como hoja en blanco
y en el centro y en los flancos
dibujar palabras
con mano trémula
que será la mejor manera
de hacer poesía viva.
El punto de partida
será tu largo cuello,
bajaré por tu frente bello
y en el medio de tu vientre
dejaré toda esperanza
de un final coherente.
Perderé la razón pura
en la profunda altura
de tus recovecos
y de tanto en tanto un eco
de letras dibujadas
y luego desteñidas
cantarán que hay vida
en lo mejor de los versos
escritos en tu cuerpo.

Quiera el dios de los desterrados

No puedo cometer el suicidio
de dejarte partir,
ya no quiero transcurrir
inerte los días venideros.
Es un acto de valentía
tomar la vida por los cuernos,
montar a su grupa
y a los saltos ir donde yo quiero.
Ahora que te encontré
acaso sin buscarte seriamente,
ahora que te tengo frente a frente
y que caminás a mi lado
quiera el dios de los desterrados
y vueltos a su tierra
que encuentre la manera
de enamorarte para siempre
que es como yo estoy enamorado.

21 octubre, 2005

Devaneo de un ateo que cree en milagros

No puedo sacar
mi cuerpo de tu cuerpo,
no puedo olvidarme de vos
ni recordar ahora
que estuve muerto
en vida
y al encontrar
tu preciosa compañía
descubrí que mi corazón
aún latía
y que la razón que tantos dioses
había negado
estaba equivocada.
Un obsequio divino,
un designio,
un cachetazo a mi ateísmo.
Apareció el amor
y con él se derrumbó mi mundo,
mi filosofía
me ha quedado chica.
Ahora me domina el sentimiento
y el deseo urgente.
Camino entre la gente
como un ángel pisando nubes
y no hay cosa que perturbe
mis sueños y fantasías
que por obra divina
estamos juntos.

Musa malcriada

Musa malcriada
al lado tuyo las hadas
son poca cosa.
Musa orgullosa
de los poemas que das vida
y son comida cotidiana
para el poeta que te ama
como nunca amó a otra persona.
Musa sorprendente
que superó todos mis sueños.
Jamás mi inspiración
hubiera podido inventar los versos
necesarios
para recrear tu alma
y el saber de tu cuerpo.

Colecciono noches

Colecciono noches
de promesas, de vivencias,
de charlas.
Colecciono noches tras noches
de estar con ella,
mi sol, mi estrella
que arma y desangra
mi futuro.
Colecciono noches
de cielo oscuro,
noches de luna redonda
en las cuales el hombre
se transforma
en otra cosa.
Colecciono noches de palabras,
de abracadabras
y pases de magia.
Atesoro los recuerdos
de cada una de sus miradas.
Y mi pericia
de acariciar su tibio cuerpo
se debe en gran medida
a la memoria de su tacto.
Colecciono noches
y en sagrado pacto
hemos decidido
con poco tino y menos tacto
hacer acopio y abuso
de las noches y los días.

20 octubre, 2005

Por ella yo persigo

Ella ilumina mi vida
y le da sentido.
Por ella yo persigo
incansable mis sueños
y ya no soy el dueño
de todos mis poemas.
Ella tiene mi corazón
en la palma de sus manos.
Ella es tanto
y tan importante
que si sigo adelante
en el derrotero de mi vida
es para evitar su partida
y lograr alcanzarla.
Sospecho que tal vez
no la merezca,
pero quiero
que mi alma crezca
para estar siempre a su lado.

Todos mis siempres

En realidad éste amor mío
ha despertado en mí
infinidad de sensaciones
y pensamientos.
Y creo más que en milagros
en merecimientos
y construir todos los días
el mejor camino,
que el destino
en gran medida
está en nuestras manos
y los héroes o villanos
acaso poco importen
aún cuando los mismos dioses
pueden hacerse los distraídos
y dejar que el sentido
que uno mismo da a su vida
y la diaria filosofía
nos lleven a algún lado.
Quizás las musas y los hados
fueran sólo impulso
y el esfuerzo cotidiano
fuera nuestro asunto.
Y ahora no pregunto
si querés compartir
conmigo tu futuro,
pero te aseguro
que lucho siempre por mi sueño
de vivir con vos
y cumplir todos mis siempres.

Dudas razonables

Tal vez si exista un dios
si apareciste así
en mi vida como milagro.
Tal vez todos estos años
de amargos desengaños
fueran sólo ejercicios
para el crecimiento
de mi alma.
Acaso recién hoy te merezca
y hoy recién pueda
verte como instrumento
o camino recto
hacia algo más alto.
Tu amor es tan perfecto
que no es sólo sentimientos,
sensaciones y sueños.
Tu amor es tan completo
que me muestra un universo
tan claro y luminoso
que hasta tiene dueño.

19 octubre, 2005

Curvas

Hay curvas y contracurvas
fugaces y peligrosas
que al transitar por ellas
se pierde su estrella
y el camino.
Curvas cerradas y abiertas,
curvas enruladas
o de elegantes volutas.
Hay curvas del camino
que ameritan recelo.
Hay curvas de desvelos
y para enamorarse.
Hay curvas tan peligrosas
que feliz dejaré en ellas
la vida.
Hay curvas del destino
y curvas divinas.
Y yo que no soy distinto
a tantos valientes aventureros
declaro que no quiero
sino perderme en ellas.

Sueños de una mañana de verano

Se acerca el verano
y de tu mano
soportaré el calor
y el blanco fulgor
que derrite el asfalto.
Ya sueño
con una playa dorada
y tu silueta dibujada
que entra al agua brava,
ya te veo
entre las dunas,
tu magia desnuda
que devora mi carne
en un aquelarre
de sal, sol y arena.
Tu alma asesina de penas,
creadora de poemas
que da vida
entre tus piernas.
Decanso perfecto
bajo el sol ardiente
mi cuerpo casi muerto
vive candente
a tu lado.

18 octubre, 2005

Perdoname

Perdoname por no darte siempre
lo mejor de mí.
Perdoname por ser tan infantil
al creer que no te das cuenta
de la batalla cruenta
que libro día a día.
Perdoname por ser tan egoísta
cuando callo
todos mis problemas,
pero no sé como contarte
de mis idas y vueltas
cuando muy resuelta
me decís de tus dudas.
Perdoname por no querer perderte
y por ése afán
no poder darte más que tristezas.
Perdoname la ligereza
con la cual me desentiendo
de tus ruegos de tiempo
y de menos compromiso,
es que yo preciso
tu presencia siempre,
pero por sobre todo
cuando ando entre serpientes
por senderos negros.
Perdoname los agujeros
que escarbo en tu alma,
pero creo en un mañana
mejor y diferente.
Perdoname si parezco ausente,
pero mi vida urgente
a veces me reclama.
Perdoname si tu cuerpo me rechaza
que a mí también me duele.
Perdoname que te ame
y te reclame
el mismo sentimiento.
Perdoname si yo siento
que podemos ser felices
y que éstos días tristes
se olvidarán mañana.

Una noche para el recuerdo

Una noche más contigo
y el paso del tiempo
sigue en su capricho
de demorar las soledades
y ser fugaz en el encuentro.
Una noche de promesas
escritas en el cuerpo,
de manos que recorren
y de bocas que encienden
tormentos y hogueras.
El mundo no existe fuera
del límite de las sábanas,
la noche y luego la mañana
son silencio
fuera de tus gritos
y del rítmico golpeteo
de nuestros sexos.
Otra noche para el recuerdo,
para atesorar en la memoria
de los placeres del cuerpo.

Poemas olvidados

Poemas inventados
en el momento del amor
y luego olvidados.
El instante de la pasión
atrás los ha dejado,
palabras que se pierden
en caricias y en besos dibujados.
Poemas olvidados
por la acción,
por la consumación
de los versos
beso a beso.
Poemas olvidados
que tus ojos no leyeron nunca
y tu memoria no retuvo.
Poemas de cielo oscuro
y de noche cerrada
cuando se abren nuestras almas
y festejan los cuerpos el gozo.
Poemas de silencios
y susurros.
Poemas de calmas y apuros.
poemas de palabras peligrosas,
fugaces, fuertes y hermosas,
poemas de amor único.
Poemas hechos a medida
de los tiempos
tan efímeros
como las noches al lado tuyo.

16 octubre, 2005

Atado a tu cintura

La luna me mira
y suspira
al evocar el peligro
que yo creí tan mío
y ahora descubro también tuyo
y todo mi orgullo
de cazador solitario
se ve apocado
por las enormes dudas
que conlleva una criatura
tan dulce y tan segura
de sus raíces
que hace temblar
mi estructura
de pensamiento
y mi filosofía.
Te pensé tantas veces
un poco víctima
y parecés ser
sólo un instrumento
de un ser que aún no siento
pero que se me insinúa.
Y lo que fue imposible,
increible e inasible
hace aunque no quiera
temblar a mis ideas
que se resquebrajan
ante el peso del encuentro.
Extraño sentimiento
del cazador cazado
en pleno vuelo.
Ahora mi desvelo
es comprender que me pasa.
Yo que siempre fui descreído
en tu amor creo
que hay mucho más
que meras coincidencias.
Y a fuerza de hablar
honestamente y a conciencia
veo que mi ciencia
poco sabe
y mucho duda
sobre un ser omnipotente
que quizás tengo enfrente
atado a tu cintura.

Vendrá el mañana

Vendrá el mañana
tan incierto como siempre
pero esta vez
vendrás con él
en tu regreso
y es por eso mi alegría.
Vendrá el mañana
y con él toda la aventura
de saberme acompañado,
la cordura y la locura
de sentirme enamorado.
Vendrá el mañana
tan incompleto como siempre,
tan lleno de tareas
por cumplirse
porque si hay que buscar sueños
primero se deber ser dueño
de las ganas de lograrlos.
Vendrá el mañana
tan incierto, tan temible,
pero yo haré lo imposible
y lucharé día a día
contra todo, contra todos,
aún contra nosotros mismos
y cerrar todos los abismos
para que sigamos juntos.

14 octubre, 2005

Miente el almanaque

Miente el almanaque
cuando enumera el paso de los días,
el tiempo se transforma
en mera fruslería
y nos damos cuenta
que la cuenta de los días
no importa.
Que al fin nos conocemos
de toda la vida.
Sólo notamos los relojes
cuando estamos lejos
y las vidrieras como espejos
nos devuelven
nuestra imagen sola.
Pero en la memoria
y aún en el cuerpo
llevamos medio de prepo
la presencia tan amada.
Es que en cada
uno de los recíprocos besos
creamos los preceptos
para una vida juntos.
Y ya no te pregunto
si me querés con un te amo,
ya no te reclamo
definiciones y promesas,
prefiero la sorpresa
ansiada y esperada
de tu bienvenida que no deje
que me vaya nunca.

12 octubre, 2005

Perdón

Acaso deba pedir perdón
por ser tan feliz,
deba agradecer por un amor
que no quise, pero encontré.
Nunca nada es fácil
y lo que hoy es grácil
puede luego ser horrible
pero quién presigue
alguna vez logra su cometido
y las piedras del camino
pueden volverse flores.
Siempre las mejores intenciones
corren el peligro
de terminar en nada
y la vida es tan rauda
que nos quedamos varados
esperando un barco
que ya ha zarpado.
A veces las promesas incumplidas
se olvidan y las heridas
se cierran y se olvidan.
Pero quién me quita lo vivido
si contigo decido
seguir intentando
querer y ser querido
y andar nuestro camino
paso a paso.

10 octubre, 2005

Torpezas incruentas

Con ferocidad soy tuyo
con la fuerza de mi libertad
soy todo tuyo.
Acaso carezca de virtudes
y de mi amor dudes
y de mis palabras peligrosas.
Pero sombrías o graciosas,
mis palabras y acciones
tienen como único horizonte
la terrible gana
de enamorarte
como yo te amo.
Sé que cometo errores,
algunos malos, otros peores,
pero es torpeza y no engaño
es mi cerebro confuso
por tantos extraños
acontecimientos.
Amarte me place y me duele
y no siempre tengo tadas conmigo
y lo que con tanto afán consigo
suelo perderlo por idiota.
Entonces mi corazón explota
de terror y desespero
porque todo lo que quiero
es que veas que te amo.
Perdoname si te hago daño
pero no te daré más desengaño
que pequeñas torpezas incruentas.
Ojalá que te des cuenta
que nada más quiero de la vida
que tu vida.

Un te amo por un te quiero

Tiemblo al escuchar
tu te quiero
porque sé que dice
sólo eso.
Sé que el cariño no es amor
y tal vez pasajero.
Y te amo tanto
que me duele
esa diferencia de criterios.
Tiemblo al pensar
que todo dependa
de mi voluntad
y de mi esfuerzo
y que mi insistencia
se te antoje tormento.
Pero no puedo callar
lo que tanto siento.
No quiero dejar de soñar
el día que enamorarte pueda.
Y mientras tanto
seré sordo a tus silencios
y necio a tu ruego
seguiré insistente,
haré frente a mis miedos,
que aún vale la pena
pagar el precio
de un te amo
por un te quiero.

09 octubre, 2005

Palabras prohibidas

A veces se me hace difícil
hablar con vos a la distancia
deben ser las fragacias
de nuestros cuerpos
que no llegan a las narices.
Deben ser las miradas
que no miran nuestras almas
tan felices
de estar siempre tan cerca.
A veces se me hace imposible
transmitir la fuerza de mis besos
cuando hablo de amores
y vos pedís cariños,
cuando pienso en mañanas
y vos no sabés si estarás conmigo.
Comprendo que no siempre
podamos sentir lo mismo
o ver el futuro tan claro
o tan dañino.
Comprendo que tu camino
es más duro que el mío
y que mis torpezas
más te lo complican.
Pero me duele, mi vida,
cuando me sale una de mis tantas
palabras prohibidas
y suenan todas tus alarmas
y se cierra tu alma
y yo quedo afuera tiritando de frío.
El único antídoto
es un abrazo
mientras a los ojos te miro,
es un remanso
a tus miedos tan descreídos
y mi gozo te contagio
como la risa de un niño.
Acaso deba purgar culpas,
acaso nada tenga sentido,
pero mi amor es tan tenaz
y como siempre te persigo
que algún día alcanzaré
tu alma tan esquiva
y acaso se haga amor tu cariño
y mi amor fuera siempre contigo.

Nada más negro

No entiendo porque
necesito que el tiempo
pase veloz
cuando estás lejos,
en ninguna parte
y en mi corazón.
Nada más negro
que mi temor a tu olvido,
nada más amargo
que el amor
que aún no te dí.
Es que mi vivir
es tormenta de arena
que lacera y ciega
cuando no estás aquí.
Vuela el tiempo
cuando estamos juntos
y hoy cada segundo
es eterno,
parezco enfermo
en soledad.
Nada más negro
que temer a tu ausencia,
nada más amable
que tu piel en la oscuridad.
Perdoname si
mi amor te pesa
y mi alma no cesa
de pretender tu amor.

08 octubre, 2005

Cuando te enamore

Cuando te enamores de mí
habrás librado la peor
de tus batallas.
Cuando te enamores de mí
te acompañaré
vayas donde vayas
hasta el final de los días.
Cuando te enamores de mí
la prisa y la osadía
se harán calma
como cosa cotidiana.
Y el olvido y la ignominia
serán solo pesadillas
del pasado.
Cuando te enamores de mí
te prometo, querida,
que las flores envidiarán
tu alegría
y el sol acobardado de tu brillo
se nublará por semanas
que con tu luz enamorada
alcanzará para entibiar
nuestras almas.
Cuando te enamore
dejaré mi noche
perdida en tu alba.

06 octubre, 2005

Por tí he regresado

Los amables lunares
de tu cuerpo
evoco en este momento
que estás tan lejos.
Y persigo el derrotero
de tus pecas
como abejas
en busca de néctar.
Mis ojos no olvidan
y mis manos aún retienen
tu perfume.
Y la sed que me consume
clama por tu aliento.
Este es un momento
muy difícil de mi vida
y tu breve partida
me hace recordar
cuando estuve solo.
Es que el abandono
es un fantasma recurrente,
siempre lo tengo enfrente,
atrás y a los costados.
Es que los hados
son tan fuertes
como malvados
y se divierten
con mis dudas
y mi temor al fracaso.
Y yo de tan enamorado
no los miro
hasta que en un descuido
me acometen
y corro la suerte
del amante que espera
de mil maneras
a su amada
que por unos pocos días
está tan lejos.
Acaso fuera el reflejo
de mi conciencia intranquila
y mis brazos
que tanto te extrañan,
pero quiero saltar mañanas
para acelerar tu regreso.
Es por eso
que este poema
parece eterno,
es mi desvelo
que en palabras
te atrapa.
Y quiera este fin de semana
pasar urgente
para conmigo tenerte
de nuevo en un parpadeo.
Quiera la luz del cielo
que cuando vuelvas
te arrojes a mis brazos
y con muchos besos
me digas:
por tí he regresado.

Poema para tu viaje

Me gustaría que te vayas
y que luego quieras volver
a mí.
Me gustaría que me extrañes
y que ese sentimento
abra otros sentimientos
más hondos.
Me gustaría que tu cariño
crezca y confíe
que mi amor
no es mera declamación
y sí acción contínua.
Y que mi porfía
fuera bienvenida
como pura alegría.
Me gustaría ser tu sombra
como eterna compañía
y que la tristeza fuera abolida.
Me gustaría, mi vida
ser parte de tu vida
tanto tiempo
y recordar un día los inicios
como recuerdan los viejos
sus años mozos.
Me gustaría un abrazo
feliz y esperanzado
a tu regreso
y que el proceso del comienzo
siga su marcha ineludible.
Me gustaría que mis sueños
imposibles
fueran también tus sueños.
Me gustaría un buen viaje
y un mejor retorno.

Las pecas de Bettina

05 octubre, 2005

El día más bello

Hoy te regalaré
el día más bello
en mucho tiempo
de días repletos
de muchas sensaciones
y pocos sentimientos.
Te daré mi amor
en las yemas de mis dedos
como tesoros extraños
y delicados en extremo.
Envolveré cada uno
de mis besos
en palabras dulces y verdaderas
que no son para cualquiera
y no cualquiera resiste
y que preguntan
por qué estás triste
cuando debieras ser alegre.
Saldremos por las calles
y nuestro abrazo
será el detonante
en plena acera
de las mil maneras
de acariciarnos en público.
Y al regreso
te desnudaré despacio
y en el espacio de tu cuerpo
arrojaré mi semilla
y luego todo será calma.
Después la maravilla
nos hará insistir
y la cama será hoguera,
luego cenizas
y en su tibieza
dormiremos
solo hasta despertar
de nuevo
y de nuevo las caricias
como en el comienzo.
Y no habrá receso
de amores y de besos
hasta el fin del día.

Cuando estés segura

Cuando estés segura
de mi amor
viviré contigo.
Cuando estés segura
que el sentimiento
que tienes por mí
es más que cariño.
Cuando estés segura
de tí misma
y cuando los miedos
sean cosas del pasado.
Cuando estés segura
de poder ver un futuro
no tan escaso
de ilusiones
y dejes en mis brazos
acunar tus emociones.
Ese día, estoy seguro,
darás cuenta
que la seguridad
nada tiene que ver
con la vida
y que el miedo
es tan absurdo
como la despedida.

03 octubre, 2005

Poema C

Soy un hombre feliz,
hoy el vivir
me sabe delicioso.
Ahora lo hermoso
se queda conmigo
y se hace poemas
que me queman
y mis manos
lo esparce en estrofas
que cantan tu gloria,
que llegan a tus ojos
y los nublan de alegría.
Mis manos leves
toman la pluma
e inventa poesía
el alma encendida
que vos me mostraste
que tengo todavía.
Tu luz me contagia
y veo en mí tanta belleza
que quiero darte siempre.
Me confieso feliz
no solo alegre
porque desde que te conocí
no puedo dejar de quererte
un poco más todos los días.
Y quiero que mi vida
siga tan rica
que valga tanto la pena
vivirla.

Poema de Bettina VI

Gustoso soporto tu cuerda floja,
tus no hablar de sentimientos
y las dudas que tan amorosamente
sembrás en mí día a día.
Gustoso soporto todo eso
con tal de tenerte
en mis brazos y en mis días.
Yo sé que tengo palabras prohibidas,
temas intocables y tesoros ocultos.
Sé que a veces
de tanto quererte te hago daño.
Sé que mi cariño te supera.
Pero también veo
que te gusta estar en mi abrazo.
Que te gusta mi locura
y tal vez (si mal no infiero)
algún día te sueltes.
Y explotará esa jornada
como primavera después
de un largo invierno.
Y yo estaré en primera fila.
Y seré el afortunado
que te quiera y pueda amarte.
Por nada del mundo te dejaré partir
sin antes haber bebido toda tu alma.
Lo lamento por vos
y por los desatinos del tiempo
y de la vida.
Pero yo te disfruto a cada paso,
aún con tanta duda.

Mudas palabras

Yo te hablo de amor
y tus ojos se encienden.
Amo tu elocuente
mirada que me cuenta
lo que tu boca calla
y en mudas palabras
el silencio cruento
se hace ternura.
Y como en un cuento
de caballeros en armaduras
basta una simple flor
para vencer al dargón.
Y el horizonte tan lejano
esté al alcance de tu mano.
El futuro poco a poco
se hace presente,
entonces el dolor fracasa
y la distancia se extravía
en una urgente compañía
llena de esperanzas.

Exhorto

Noche de domingo a lunes
y es justo que pregunte
si me extrañás
porque yo extraño cada día
y cada noche que en derroche
de amor no duermo a tu lado.
Poco tiempo ha pasado
desde que nos queremos
y todavía es muy temprano
para mayores compromisos
aunque existan tantos deseos
todavía es preciso
confiar más en las intenciones
y en las direcciones
que queremos tomar
la una y el otro.
Este poema es un exhorto
para bajar a tierra
a la conciencia seria
y a la manera en que ambos
asumimos el futuro
y si mi alma volátil
y tu corazón duro
se pondrán de acuerdo
para hacer al mañana
posible y hermoso
a medida de nuestros sueños.
Y si esos sueños
pueden despertarse juntos.