02 febrero, 2006

En el caos de tus sábanas

Alguna vez te advertí
de que te escaparas de mí
y de mis ansias.
Muy antes aún podías intentarlo,
pero es tarde para lograrlo
ahora que te has enamorado.
No te dejaré huir
y que tiñas de gris
mis ilusiones.
Que me aguarda un porvenir
de conquista permanente
y de cuerpo, alma y mente
me abocaré a ello
en busca del destello
de tu piel en llamas.
Escapáte de mí
te decía sin mucha gana,
pero ahora lo que quiero
es que entierres tus miedos
en el caos de tus sábanas
cuando después de una noche mágica
duermas muy cansada
conmigo tan abrazada
que ya no puedas soltarte.
Y de hoy en adelante
ya no habrá advertencias,
solamente la urgencia
por en tu vida eternizarme.