26 enero, 2006

Celebro

Celebro estar vivo
luego de años y años
que mejor quedan en el olvido.
Tiempos de males y desengaños,
pero que no han causado un daño
irreparable.
Ahora los días más amables
me hacen la promesa
de una vida bella
y de sueños imposibles
que acaso dejen de serlo.
Ahora el universo
ya no es tan perverso
y me muestra una sonrisa.
Quieran los hados del destino
eternizar el presente tan vivo
y convertirlos en mañanas.
Quizás todos esos años negros
tan lejanos y pretéritos
se me hagan ligeros
y no ensombrezcan mi esperanza
de inclinar la balanza
un día y para siempre
hacia un amor lleno de gracia.
Y mi absoluta constancia
por estar a tu lado
dé los frutos esperados
y no se acaben nunca.
Que si esta historia queda trunca
quedarán de muerte heridas
mi corazón, mi alma y mi vida.