28 abril, 2006

El duelo se termina

Sé que pronto volverás
y volverás mejor que nunca.
pero toda la tristeza junta
más tristezas
y extraño la tibieza
de tu cuerpo
y tus ojos y caricias
y todo el largo de tu pelo.
No puedo si no seguir el duelo
hasta el exacto minuto
del encuentro,
cuando caerán los velos
y se irá la agonía.
No puedo sino, querida,
que esperar apesadumbrado
porque desde que me has dejado
solo y confundido
mi corazón se ha sumido
en un pozo negro.
El duelo se termina
y con ello vuelva la vida
y tal vez fuera la vida
que siempre he soñado.
Pero el dolor no me ha dejado
pensar mucho en el asunto
y por ello me pregunto
por qué tardan tanto las horas,
que en su indiferente demora
está mi corazón palpitante
en busca del instante
del abrazo tan ansiado.