24 febrero, 2007

Tu amor en mis brazos

Mar salvaje y desbocado,
viento helado
en medio del desierto,
sendero abierto
en una selva inextricable.
Y también amable
caricia en la mañana.
Así es tu amor
entre mis sábanas,
así es tu amor
en mis entrañas.
Poderosos claroscuros,
gritos y susurros
que el alma desbocada dice
en la tormenta de la carne,
que borra cicatrices
con sus dentelladas.
El aire eléctrico
de antes de la tormenta,
las fauces abiertas
para dar vida a la vida.
Así es, querida
tu amor en mis brazos.
Fuego a lo ancho y a lo largo
mientras tu regazo
promete más milagros.