09 enero, 2006

No puedo

No importa cuanto me esfuerce
por demostrar lo que te amo
siempre se tuerce
el espíritu vano
por llegar a tu corazón.
No existe fuerza ni razón
que te de confianza
si tu alma piensa
y tu mente teme.
No puedo salir indemne
de tus tormentas
y a tientas
procuro defenderme
sin conseguirlo.
No importa cuanto trate
de penetrar a tu vida
cuando mis caricias
tocan heridas
que ni siquiera conozco
y poco a poco
el placer te duele
y el cariño te mantiene
en vilo.
No sé andar con sigilo
cuando la vida clama
hacer grande lo pequeño.
Y para vos mis sueños
son motivo de zozobra.
Mi alma que te busca
entre las sombras
a veces se extravía
cuando la luz de tu sonrisa
se hace furia que lastima
y que tiñe de llanto,
de pesares y de espanto
lo que fue dicha.
No puedo hacerte ver
mis ojos enamorados
cuando todos mis actos
son juzgados
como sospechosos
y los momentos dichosos
se esfuman tan veloces
que los pavores feroces
se disputan sus despojos.
No pueden tus enojos
enseñorearse del destino
que con tanto ahinco
me desvelo por darte.
No puedo enamorarte
si no tenés ganas.
No puede la confianza
nacer de la nada.
Y la nada se hace todo
y hace nada la esperanza.